Aurelio González Ovies
La luz de nuestras casas es de noche
amarilla,
las estrellas nos guiñan su pena en amarillo,
la infancia es amarilla cuando usa
flotadores,
y amarilla es la cofia de algunos tulipanes,
un campo de mostaza, las esponjas,
la cintura del plátano, la espiga,
la fama del aceite y los abrigos.
Todo puede ser nada, todo o amarillo.